Vistas a la página totales

sábado, 3 de octubre de 2009

EL PADRE DE LA HIJA DE ALICIA

Anoche me fui a la cama con síntomas gripales. Me dormí enseguida. En medio de la bruma típica de los sueños, creí ver a un hombre moreno, rondando los cincuenta, que sería griego radicado en Entre Ríos. No recuerdo quien dijo que era el padre de la hija de Alicia.
¡Qué grato! Querida amiga, no estás sola con tu hija, no es que la hayan rechazado.
Mi alegría no tenía ubicación, corría a contarle a ambas cuando algo emitió un ruido agudo en la esquina y me desperté de golpe: el Mundo seguía ahí, con sus blancos, grises y negros.
Y la hija de Alicia también sigue ahí: linda como un sol de quince años, fresca como un capullo, llena de amigas y una vida entera por delante.

1 comentario:

José Antonio Illanes dijo...

Ese entrevelo que precede a los sueños no sólo es mágico, es que a veces es premonitorio.